“He descubierto que los límites no existen para nuestro cuerpo. De él solamente dependerán la velocidad y la fuerza, pero los límites reales, los que nos conducirán al abandono o a seguir luchando, los que nos permitirán alcanzar nuestros sueños, no dependen de nuestro cuerpo, sino de nuestra mente, de nuestra motivación, de las ganas de hacer realidad los sueños”

lunes, 18 de noviembre de 2013

Postre, copa y puro.

Llevaba, ya un par de semanas sin escribir, y han sido dos semanas muy intensas, ya que han cerrado un cíclo muy importante. Pero empecemos por la semana del 4 al 10 Noviembre; entre semana salí tres veces pero seguía notando una molestia en el pie derecho, no le estaba dando mucha importancia, pero el Jueves por la noche me dio por mirarme el tobillo y lo tenía como una "bota", tenía toda la parte interior del tobillo hinchada, es cómo si me hubiera hecho un esguince, pero el caso es que no me acordaba de haberme hecho nada. El caso es que el Viernes que tenía pensado hacer un tirada a ritmo rápido, no salí, ya que me quería reservar para la Media Maratón de Moratalaz, que sería el Domingo. 

Este año iba a ser la segunda vez que hacía esta media, la otra vez fue en 2011 también preparando Valencia, no es llana pero tampoco es muy muy dura, así que tenía como objetivo correr más rápido que el ritmo de maratón pero sin cebarme, ya que justo 7 días después tenía Valencia, y no quería gastar enegías. La salida era a las 10:30 así que no tuve que madrugar en exceso, y a eso de las 9:30 ya tenía todo preparado. Eramos en torno a 1.000 inscritos, mi objetivo cómo he comentado era hacer menos de 5:00 min/km, así que me había propuesto hacer en torno a 1:38-1:37, y con esa idea salí. Ya en el primer km me ví muy fuerte, corriendo muy suelto y con muy buenas piernas, y de hecho el primer km me salió en 4:18 (cierto que tiene parte de bajada), seguían pasando los kms y me seguía encontrando muy bien, pasando gente, sin sufrir lo más mínimo, apretando en la subidas y recuperando en las bajadas. En la primera vuelta me encuentró con uno de los chavales que hizo Cobeña el año pasado, me pregunta que tengo pensado hacer, y le digo que 1:38 y me dice: Vas mucho más rápido!! En este momento me doy cuenta que si sigo así bajado de 1:33 (mi mejor media hasta ese día), por lo que decido intentarlo (obviamente con el calentón se me ha olvidado que en 7 días tengo el Maratón de Valencia), y no sólo no bajo el ritmo sino que lo subo un poco, pero sigo yendo muy muy bien, sin sufrir, sin jadear, tensando al grupete que se me ha pegado en las cuestas y dándoles cuartelillo en las bajadas. Mentalmente me vino muy bien que parte del recorrido de la media fuera el mismo por el que hice los 50 kms de Vallecas, qué diferencia de ritmo. Cuándo me quiero dar cuenta he reventado al chaval de Cobeña y ya no llevo grupeta detrás, muy poca gente me ha adelantado y eso me está dando una moral importante.

Cuándo me quiero dar cuenta estoy entrando en el estadio dónde acaba la carrera, miro el reloj y veo que no sólo bajo de 1:33, sino de 1:32, al final 1:31:37, pero lo mejor es que acabé muy entero.

Ya en casa analizo que si habrá sido bueno correr tan rápido esta carrera teniendo el maraton en 7 días, pero la verdad que me encontré como nunca antes lo había hecho.

La respuesta de si me vino bien o no, en la siguiente entrada...


Así me encontré yo...

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